Creación literaria
Las actividades que he realizado de crear textos breves ha
sido en el curso de tercero de primaria. Esta aula se compone de 25 alumnos, es
una clase tranquila y a la que le gusta leer e inventarse historias, por ello
he decidido hacerlo aquí, para que disfruten haciendo historias de cada uno de
los géneros literario y de forma distinta a la que están acostumbrados.
Es muy importante darles libertad creativa a la hora de
trabajar estos géneros ya que ellos saben perfectamente lo que les gusta y lo
que no, nosotros debemos ser simples guías para ayudarles a que esos textos
encajen es el género literario que queremos.
Gracias a los apuntes y a las actividades modelo que nos
incluye Irune en Moodel he podido inspirarme y escoger la más adecuada para mi
curso, para poder acercarles la literatura de la forma que más les gusta y que
pocas veces o casi nunca pueden trabajar. En el bloque 1 hemos visto las características
que debe tener un texto literario, su vocabulario, su trasfondo y su forma. Sin
embargo, ahora debemos crearlos desde cero con ayuda de unas pequeñas
actividades que ya he citado anteriormente. Ya que aunque sean actividades
puntales es la forma correcta de trabajar la literatura. Esto como docentes,
siempre lo tenemos que tener presente.
Al principio, he tenido que hacer una breve explicación de
los tres tipos distintos de géneros literarios ya que ellos aun conociéndolos,
no sabían diferenciarlos.
Comenzamos las actividades:
Prosa:
Primero barajé la opción de la creación de historias ligadas
y pensaba que me decidiría por ella, pero un día en la reflexión de la mañana
salió el tema de la familia y la importancia. Una de las cosas que más me
sorprendió es como defendían sus raíces, de donde venían y lo orgullosos que
están de ello. Así que me decanté por la actividad de crear un apellido.
Para ello, he hecho yo antes un apellido con su escudo y su
historia. En el he escrito lo que significaba para mí lo que había dibujado y
por qué había utilizado esos colores o esos objetos, teniendo así una breve
historia de donde proviene mi apellido, obviamente inventada. Como he visto que
la idea del escudo les gustó, puse unas imágenes en el proyector donde
aparecían distintos tipos, para que así pudieran fijarse en algún aspecto o si
les llamaba la atención algo en concreto.
Ahora es el momento de los alumnos, les he repartido un folio a cada uno, en el tendrán que poner su apellido o uno que se quieran inventar, dibujarán un escudo que les identifique y escribirán la historia de ese apellido.
Haciendo esta actividad me he encontrado con mucha variedad,
ya que, unos pocos se lo tomaron muy a pecho y quisieron hacer su apellido con
una historia que representara a su familia, otros contaban por qué son así, y
otros no sabían por donde empezar. El resultado ha sido muy satisfactorio y
estaban muy contentos de su trabajo.
Lírica
En este caso he elegido la referencia de las letanías, ya
que son fáciles y divertidas. Esta actividad la hicimos de forma oral en clase
estos últimos días de clase aprovechando que estaban escribiendo una carta a
sus padres pidiéndoles que quieren de ellos para estas navidades, como pueden
ser, pasar más tiempo con ellos, que trabajen menos para que estén más tiempo
en casa, jugar con ellos, etc.
Esas cartas fueron muy bonitas y me sirvió como inspiración
hacer con ellos esta pequeña actividad, ya que si ellos querían podían
escribirla después en sus cartas.
La letanía tenía como tema principal los padres, primero
puse yo un par de ejemplos y mi tutora de prácticas también se unió, al ver
cual era el mecanismo de la letanía los alumnos se fueron animando poco a poco
y ellos mismo hacían una gran letanía de forma oral.
Algunos de los ejemplos que hicimos en la pizarra fueron los siguientes:
En esta clase hay 25 alumnos con 25 vidas distintas y con
muchas historias que están formando poco a poco su forma de ser y su vida
personal. Se hizo esta carta a los padres porque muchos de ellos se quejaban
que nunca podían hacer nada con sus padres o que simplemente no podían estar
todo el tiempo que querían con ellos.
La tutora simuló la creación de una carta a los reyes, pero
teniendo como receptor los padres de cada uno, cada carta era única y
personalizada por ellos, nosotras no exigíamos nada, solo que ellos expresaran
lo que querían para sus padres y para ellos estas navidades.
Me parece que esta actividad es totalmente adecuada al
momento, ya que dio un paso más a poder expresar sus sentimientos hacia los
demás a la hora de añadir una frase más a la letanía, además con 8/ 9 años,
empiezan a mostrar esas inquietudes, sentimiento y emociones, su vinculo
familiar lo tienen ensalzado, son lo más importante.
Dramatización:
En este apartado hemos hecho una improvisación, normalmente
en clase suelen trabajar esta faceta, ya que mi tutora quiere que pierdan el
miedo a hablar en público y tengan soltura a la hora de expresarse.
Normalmente lo trabajamos con pequeños fragmentos de
historias o incluso el inicio de una historia inventada.
El rol de los alumnos es intervenir en algún momento
siguiendo el hilo conductor de la historia, ellos lo hacen de forma voluntaria
y aleatoria, nadie tiene nada fijo si no que tienen que hacer volar su
imaginación para crear una obra de teatro.
Estas obras suelen ser ente unos 15 y 20 minutos, no deben
ser de más tiempo porque podemos arriesgarnos a que sea pesada y aburrida, sin
embargo, si vemos que la historia progresa adecuadamente y que ellos lo
disfrutan podemos dejarles continuar. Todo esto depende del docente.
Sinceramente creo que la improvisación es muy importante ya
que en nuestra vida vamos a hablar ante público todos los días. Con ocho años
son muy sociables y se relacionan fácilmente, están empezando a formar ya su
propia identidad y es muy importante que lo puedan hacer abiertamente y sin
ningún tipo de tapujo ni vergüenza, ya que así podemos ayudar a normalizar
temas que para ellos igual ahora no lo son o son “temas de adultos”, según
ellos.
En esta improvisación les conté lo siguiente:
Era una tarde de verano y justo a lo lejos se veía como un
chico venía corriendo a nosotros, era Enzo y venía con cara de miedo. Avisé a
todos los que estábamos jugando en el parque, entonces Enzo llegó y dijo…
Desde aquí ellos levantan y van hacia el centro de la clase
y empiezan a actuar. De ellos depende intervenir y sentarse o quedarse de pie
si quieren seguir hablando.
Las historias que salen suelen ser muy interesantes, ya que
cada uno saca sus emociones o sus inquietudes en la improvisación. Con esta
improvisación, salió el tema del acoso escolar y fue impresionante como niños y
niñas de 8 y 9 años son capaces de hablar de un tema tan importante,
reflexionar e incluso dar consejos para que esa situación desaparezca.
Normalmente participan los veinticinco alumnos de la clase,
si es verdad que no todos están igual de implicados ya que hay algunos que les
cuesta más por timidez o simplemente por desgana, sin embargo, la gran mayoría
pone muchas ganas y participan activamente.
Estos resultados son prácticamente visibles al momento ya
que día a día ves como a la hora de preguntar una duda o simplemente contar una
anécdota se expresan con mucha más soltura y con más facilidad de habla.
(En el caso de la lírica y el teatro, hemos hecho ejemplos
de forma oral con mi tutora y de forma escrita en la pizarra del aula. Como
estaba tan metida en la actividad se me olvidó por completo hacer fotos del proceso,
sin embargo mi tutora le pareció interesante hacerlas porque los alumnos
estaban muy entusiasmados y participativos, pero esas fotos no puedo
utilizarlas ya que salen niños del aula y para poder exponerlas debería pedir
permiso al colegio, tutora y familiares. Para no meter en un compromiso a todas
estas partes, por ello he optado por no poner dichas fotos.
Para que quede constancia he subido algunas fotos de dichos ejemplos pero hecho en casa.)
Para que quede constancia he subido algunas fotos de dichos ejemplos pero hecho en casa.)
Las tres actividades salieron igual de bien, pero la
dramatización es de forma oral, así que esa la descarté desde el principio. La
lírica aunque la hicimos de forma oral entre todos, ellos de forma voluntaria y
casi toda la clase hizo una letanía personalizada para sus padres, pero no me
parecía correcto pedirles las cartas para fotografiarlas. Por ello he escogido
la prosa, que aun siendo la última no es la menos importante.
En la prosa hicimos la historia de nuestros apellidos, cuya
actividad está explicada anteriormente. Para crear el libro que dejaría más
adelante en la biblioteca del aula, cogí dos cartulinas negras, un lápiz
blanco, un poco de pegamento, unas tiras plateadas y un lazo amarillo. Este
libro, tardé en hacerlo 20 minutos. Fácil y sencillo.
Todos los materiales son reciclados, ya que los tenía por
casa y no tuve que hacer ninguna compra. No es nada innovador, pero es una
forma distinta de libro a la que están acostumbrados los niños, ya bien porque
no está encuadernado del mismo modo que los demás libros que hay en la
biblioteca, que no es del mismo tamaño o simplemente porque en este caso, los
autores son todos los niños de la clase.
El día que hice la actividad de la prosa, se quedaron un
poco descontentos porque me llevé sus escudos a casa, a pesar de que les
repitiera una y otra vez que se los devolvería al día siguiente.
Su sorpresa fue que sus trabajos estuvieran encuadernados en
un libro y en el que además todos podían leer y ojear de vez en cuando.
Estaban muy orgulloso de su trabajo y de cómo había quedado
el resultado final.
Conclusión:
Para finalizar, tanto personal como académicamente han sido
tres actividades que me han hecho comprender mejor la mentalidad, gustos y
miedos de los niños, ya que escribiendo expresan todo lo que ellos sienten,
piensan y creen.
Estas dos actividades principales estaban muy guiadas y con
una finalidad, pero la de dramatización, que nosotros la hacemos como
improvisación todas las semanas no tiene apenas guía de parte del docente.
Con estas actividades puedes ver que es lo que realmente están
pensando los alumnos y sintiendo. Siempre es buena opción que ellos se expresen de la forma que les sea más cómoda, y con ello les ayudamos mediante la lírica, la prosa y la dramatización.
El que más me llamó la atención fue la creación de la lírica, ya que ellos mismos las hacían fácilmente y sin apenas ayuda de las docentes, pillaron al momento lo que se ejemplificaba y ellos mismos empezaron a crear su propia lírica.
Tenemos un concepto equivocado de lo que es la creación literaria y de lo que conlleva. Esta situación me la he encontrado también en mi clase de prácticas, y es que ellos mismos pensaban que debían hacer una redacción o un cuento con un tema fijo y que tenían que seguir una pautas claves para hacerlo bien.
Para mi sorpresa, fue la situación que se creó al momento de explicar mi ejemplo. Ellos pensaban que debían hacer lo mismo para poder hacerlo bien, y no entendían que podían ser originales y hacer lo que ellos quisieran.
Gracias a estos ejercicios de creación literaria podemos practicar la prosa, la lírica y la dramatización de formas distintas a la que ellos están acostumbrados, y enseñarles la forma correcta y divertida de hacerlo.
En mi futuro como docente utilizare estas actividades para enseñar a mis alumnos lo divertido y enriquecedor que es crear tú mismo tu estilo literario. Debemos empezar a trabajar de forma coherente y significativa, para que ellos en un futuro sigan este mismo camino.
El que más me llamó la atención fue la creación de la lírica, ya que ellos mismos las hacían fácilmente y sin apenas ayuda de las docentes, pillaron al momento lo que se ejemplificaba y ellos mismos empezaron a crear su propia lírica.
Tenemos un concepto equivocado de lo que es la creación literaria y de lo que conlleva. Esta situación me la he encontrado también en mi clase de prácticas, y es que ellos mismos pensaban que debían hacer una redacción o un cuento con un tema fijo y que tenían que seguir una pautas claves para hacerlo bien.
Para mi sorpresa, fue la situación que se creó al momento de explicar mi ejemplo. Ellos pensaban que debían hacer lo mismo para poder hacerlo bien, y no entendían que podían ser originales y hacer lo que ellos quisieran.
Gracias a estos ejercicios de creación literaria podemos practicar la prosa, la lírica y la dramatización de formas distintas a la que ellos están acostumbrados, y enseñarles la forma correcta y divertida de hacerlo.
En mi futuro como docente utilizare estas actividades para enseñar a mis alumnos lo divertido y enriquecedor que es crear tú mismo tu estilo literario. Debemos empezar a trabajar de forma coherente y significativa, para que ellos en un futuro sigan este mismo camino.
Webgrafía:
Labajo, I. (2018). Literatura española, literatura infantil
y educación literaria. Madrid. CSEU La Salle.
Alcoba, J. (2017). Apuntes Aprendizaje y Desarrollo Infantil
II.
Labajo, I. (2011). Actividades de lectura. Fundamentación
teórica del proyecto lector “Mascapáginas”. Editorial Pearson.