jueves, 11 de abril de 2019

Bloque 3: La escritura



“Para escribir sólo hay que tener algo que decir.” Camilo José Cela

Una vez visto la expresión y la comprensión oral (bloque 1), la comprensión lectora (bloque 2), nos queda una de las más importantes la expresión escrita. Todas estas cualidades están relacionadas entre ellas y es importante que cada una la entrenemos de forma correcta.
La escritura la podemos definir como el proceso por el que se pasa de la posesión interna de un concepto, idea o pensamiento a la transformación de ese concepto, idea o pensamiento mediante una codificación de símbolos gráficos, con intención comunicativa

Los dos conceptos básicos para la escritura son:
-          El desarrollo motriz:
Gracias al desarrollo motriz tendremos un trazo de calidad.

-          La creación:
La capacidad de recrear o concebir nuestra propia grafía y hacerla única a la de los demás.

Para todo ello es importante que desde edades muy tempranas empecemos a trabar la escritura, porque es un aprendizaje muy lento y que utilizaremos a lo largo de nuestra vida.

No hay ningún estudio objetivo detrás de la elección de un tipo de letra, pero deberemos tener en cuenta el momento evolutivo del alumno para escoger el tipo de letra que queremos enseñarles.

Como ya hemos visto, y sabemos, a hablar se aprende hablando, por imitación. Pero la escritura no. Se empezó a escribir para poder ser recordados y para poder permitirnos una comunicación diferida.
Hoy en día comenzamos a escribir porque somos obligados, no es algo natural, por ello debemos motivar al alumnado y enseñarles para qué sirve escribir con una intención comunicativa.

Se le enseña el código   ----------------   Se le enseña la intención comunicativa

No solo escribimos en la asignatura de Lengua, escribimos en Matemáticas, en Naturales, en Sociales, en Música… Por ello no solo debemos darle importancia a la escritura en un área específica, la escritura es parte de todas las asignaturas.

Para practicar la grafía debemos hacerlo con un modelo, pero eso sí, una vez  ya se tenga interiorizado el trazado de cada letra.

Esta vez la actividad será dirigida a un alumno de segundo de primaria, otro de cuarto y otro de sexto. Comencemos.



Alumno 2º Primaria:

Este alumno tiene una mala letra, con errores en los trazados y una caligrafía menos evolucionada que la de los compañeros.
La tutora se ha dado cuenta de que su grafía no es muy legible y que el niño tiene muchos problemas a la hora de escribir, parece que le cuesta. Yo como docente me acercaría al alumno:

-          Hola Lucas, me gustaría ver contigo algunos ejercicios que hemos hecho en clase, es que no tengo muy claro lo que pone aquí.
-          Vale, ahí pone… No lo sé profe, es que no me gusta escribir, me canso y me hago daño en la mano.
-          ¿Ah sí? Pues no te puedes hacer daño escribiendo, vamos a buscar una manera en la que no te hagas daño. El otro día ví en clase que te gustan mucho las adivinanzas ¿Verdad?
-          Sí, me las sé todas
-          Qué bien, pues tengo una idea que seguro que te gusta. ¿Qué te parece si cada día le dedicamos 5 minutos a escribir un par de adivinanzas y luego buscamos la solución?
-          Genial

Materiales que utilizaremos:

Rotulador, Lápiz Nº2, goma de borrar y un cuaderno de cuadrícula o cuadrícula Montessori.
He escogido el rotulador como primera opción porque como hemos dicho antes, el alumno aprieta mucho a la hora de escribir, esto hace que su postura sea la incorrecta y que por la fuerza que hace al dibujar los trazados de la letra más tarde le acabe doliendo la muñeca.
Con el rotulador conseguiremos que deje de apretar ya que si ejerce mucha fuerza, la punta se meterá hacia dentro y soltará mucha tinta. Así él deberá medir la fuerza que tiene que emplear para escribir.
En cuanto al lápiz Nº2, lo utilizaremos cuando el niño deje de apretar. He escogido este tipo de lápiz porque no es ni muy blando, ni muy duro para escribir.
En cuanto al cuaderno de cuadrícula, se lo facilitaré en el aula. Un cuaderno pequeño, que vaya recogiendo todas las adivinanzas que va copiando para que así en un futuro pueda ver el desarrollo y la mejora que ha conseguido. Utilizaremos uno con cuadrícula para que mientras el alumno esté escribiendo no se salga de las líneas.  Si vemos más adelante que el alumno controla su grafía podremos quitar la cuadricula y empezaremos a utilizar la cuadrícula de Montessori.

En cuanto al modelo de las adivinanzas serán la siguiente. (Fuente Teachers Student regular)

(AVISO: Ya sé que en la foto falta una tilde a “día”, pero debe ser que esta fuente no tiene ninguna vocal con tilde. Perdonen las molestias, sigan leyendo.)



He escogido esta tipografía para el alumno de segundo porque a mi parecer, es fácil y sencilla.
He optado por deshacerme de la letra ligada ya que es difícil para los alumnos por la destreza que hay que tener en la muñeca para hacer bien los trazos y por lo mucho que tardan en escribirla de forma correcta.
Como podemos observar, este tipo de letra no es ligada, cada letra es independiente de la siguiente lo que facilitará a la hora de escribir, ya que una vez tenga interiorizados los distintos trazos de cada grafía, podrá escribir con soltura. Obviamente, he escogido este tipo de caligrafía siempre y cuando el niño no haya realizado una letra fija durante el año anterior. Es cierto que el alumno ha empezado ha escribir, pero pienso que si ha empezado a escribir con un tipo de letra que no le gusta, no le sale bien y además se hace daño al escribirla, hacer un cambio por completo y pasar de ligada a a individual, puede ser un cambio bueno para él.
En mi opinión esta, podría ser un tipo de letra que utilizarían más adelante en su etapa educativa, ya que como hemos vivido y hemos visto, según vamos madurando y creciendo, cambiamos nuestra forma de escribir.


Modo de trabajo con el alumno:

Para llevar a cabo nuestro modelo de trabajo, le facilitaremos al alumno un cuaderno cuadriculado en el que cada hoja haya dos adivinanzas con este tipo grafía, (previamente ya hemos descubierto que al alumno le gustan las adivinanzas, por eso trabajamos con ellas).
Primero haremos un par de hojas en el aula, entre clase y clase, para ver como se desenvuelve, si le cuesta… así podremos saber si este modelo de letra le va bien o si debemos cambiar. Pero luego el proceso seguirá en casa, en la cual deberá seguir con esta rutina 5 minutos al día.
Le explicaremos cual es el modo adecuado de escribir, cómo debemos coger el lápiz… Todo esto de tal manera que no se sienta incomodo o le llegue a doler la espalda o las articulaciones del brazo por la fuerza que ejerce.
Le diremos que cada día tendrá que copiar una página (2 adivinanzas) con la grafía más parecida a la que él puede ver en el modelo. Una vez que haya terminado de copiar dichas frases, escribirá la solución debajo para comentarla con el docente al día siguiente.
Esta actividad le llevará como mucho 5 minutos al día. Así conseguiremos que el alumno no lo tome como un deber pesado que tiene que hacer todos los días y que sí lo haga con ganas de mejorar su caligrafía y con aprender nuevas adivinanzas. Para él tiene que tener un carácter de rutina y no convertirse en deberes añadidos.

Evaluación:

Para la evaluación de estas actividades debemos tener claro que no nos podemos dejar influir por la ortografía, ya que nosotros estamos trabajando la caligrafía. Buscamos que la letra del alumno sea igual o lo más parecida al modelo que le hemos dado, y por lo tanto le evaluaremos de forma continua, día a día, y a que este proceso es largo.
A la hora de evaluar, lo haremos comparando un modelo antiguo con uno nuevo, para ello nos fijaremos en los trazados y si la caligrafía es parecida o igual al modelo que le hemos ofrecido.
He escogido que estos modelos estén en un cuaderno porque así podemos ver el cómo empezó, cómo continuó y cómo ha terminado. Así a parte del docente que puede evaluarle según su progreso, puede ver él mismo todo el fruto de su esfuerzo y siempre es gratificante ver como la has ido entrenando y desarrollando.


Alumno de 4º Primaria:

Al igual que con el anterior ejemplo, me reuniré con el alumno y dialogaré con él para ver cuales son sus gustos, preocupaciones… Le haré saber que su caligrafía está un poco atrasada y que por ello le quiero ayudar a mejorarla. Al contrario que con el alumno de segundo, aquí le traeré dos o tres modelos y que el pueda decidir cual es el que más se acerca a su gusto.
Cuarto de primaria es un curso en el que aun tienen una niñez intermedia y quieren lo que ven, y a la vez quieren hacer que lo suyo destaque entre los demás. Por ello le dejo dentro de los márgenes, la libertad de que escoja el modelo de caligrafía que le gustaría hacer.

Una vez escogida la letra comenzaremos con el entrenamiento diario. Le diremos al alumno que para mejorar su letra deberá escribir dos o tres frases al día sobre el hábitat y curiosidades de los animales (Tema que previamente nos ha dicho que le gusta mucho), lo que no le llevará más de diez minutos.


Materiales que utilizaremos:

Los materiales que utilizaremos con este alumno será, un lápiz Nº2 y bolígrafo; y cuaderno con cuadricula Montessori.
En cuanto al lápiz, es un momento evolutivo que debe empezar a dejar de escribir con el lápiz para empezar a escribir con el bolígrafo y ver que, aun siendo la misma técnica, dependiendo de que bolígrafo utilicemos este soltará más o menos tinta. Por ello veo importante hacer este cambio en un momento adecuado del proceso, cuando este tenga ya interiorizados los trazados de las grafías.
El modelo de letra que utilizaremos para este alumno será la siguiente. (Fuente School Script)



Esta es una letra a la vista más madura en comparación con la anterior. Los trazados que tiene son más simplificados ya que apenas tendrá dificultad para realizarlos. He escogido esta grafía sin ligar porque creo que es más eficaz que aprendan escribiendo de forma separada, que obligarles a seguir un modelo de caligrafía ligado una por una, en el que con cada trazo se estén fijando que lo hacen perfecto. Creo, en mi opinión que es una pérdida de tiempo.

Una vez que tenga bien interiorizado estos trazados el alumno, la letra le ira cambiando poco a poco y teniendo este modelo como guía será capaz de recrearla y hacerla suya.




Modo de trabajo con el alumno:

Para llevar a cabo nuestro modelo de trabajo, le facilitaremos al alumno un cuaderno con cuadrícula Montessori.
Primero haremos un par de hojas en el aula, entre clase y clase, para ver cómo se desenvuelve, si le cuesta… así podremos saber si este modelo de letra le va bien o si debemos cambiar a otras de las opciones que teníamos antes.
Le explicaremos cual es el modo adecuado de escribir, cómo debemos coger el lápiz y/o bolígrafo… Todo esto de tal manera que no se sienta incomodo o le llegue a doler la espalda o las articulaciones del brazo por la fuerza que ejerce.

Le diremos que cada día tendrá que copiar dos o tres frases del cuaderno intentando hacer la grafía más parecida a la que él puede ver en el modelo.
Esta actividad le llevará como mucho 10 minutos al día. Así conseguiremos que el alumno no lo tome como un deber pesado que tiene que hacer todos los días y que sí lo haga con ganas de mejorar su caligrafía y con aprender nuevas adivinanzas. Para él tiene que tener un carácter de rutina y no convertirse en deberes añadidos.


Evaluación:

Para la evaluación de estas actividades debemos tener claro que no nos podemos dejar influir por la ortografía, ya que nosotros estamos trabajando la caligrafía. Buscamos que la letra del alumno sea igual o lo más parecida al modelo que le hemos dado, y por lo tanto le evaluaremos de forma continua, día a día, y a que este proceso es largo.
A la hora de evaluar, lo haremos comparando un modelo antiguo con uno nuevo, para ello nos fijaremos en los trazados y si la caligrafía es parecida o igual al modelo que le hemos ofrecido.
He escogido que estos modelos estén en un cuaderno porque así podemos ver el cómo empezó, cómo continuó y cómo ha terminado. Así a parte del docente que puede evaluarle según su progreso, puede ver él mismo todo el fruto de su esfuerzo y siempre es gratificante ver como la has ido entrenando y desarrollando.



Alumno 6º Primaria:

Al igual que con lo anteriores ejemplos, me reuniré con el alumno y dialogaré con él para ver cuáles son sus gustos, preocupaciones… Le haré saber que su caligrafía está un poco atrasada y que por ello le quiero ayudar a mejorarla. Al contrario que con el alumno de segundo y de cuarto, aquí le traeré varios modelos y que él elija cual es el que más le gusta.
La etapa de sexto de primaria es una etapa de preadolescencia. Están a las puertas del instituto y quieren destacar entre los demás, aunque aun siguen teniendo esa mentalidad infantil. Esto hace que temas como la caligrafía pasen a un segundo plano o que no le den tanta importancia como deberían, por ello, como docente debo hacer que se fije más en ella y que él mismo vea que no puede dejarla de lado porque lo va a utilizar durante toda su vida.

Una vez escogida la letra comenzaremos con el entrenamiento diario. Le diremos al alumno que para mejorar su letra deberá escribir una hoja al día sobre deportes (Tema que previamente nos ha dicho que le gusta mucho), lo que no le llevará más de diez minutos.
El alumno nos ha dicho que le gusta mucho leer el periódico digital de Marca, por lo que escogeremos una noticia no muy larga o tan solo escogeremos las frases claves de dicha noticia para que el las pueda copiar lo más parecido al modelo.


Materiales de trabajo:

Para trabajar con este alumno utilizaremos un bolígrafo y un cuaderno de cuadrícula Montessori.
Los alumnos de sexto de primaria deben o al menos deberían, estar acostumbrados a escribir ya con el bolígrafo, porque al contrario que con el lápiz, debes medir la presión que ejerces en el papel para que este no expulse más tinta de la que debe.
Me parece bien trabajar con el bolígrafo para que ellos mismos puedan medir esa fuerza y la sepan trasmitir a la hora de escribir en el cuaderno que le proporcionaré.


El modelo de letra que utilizaremos con este alumno será el siguiente. (Fuente DK Pimpernel)





Este tipo de letra es la más madura de las tres escogidas, cada letra es individual y los trazados son muy simples. Gracias a esto el alumno no debería por qué tener dificultad a la hora de copiarla de modelo. 



Modo de trabajo con el alumno:

Para llevar a cabo nuestro modelo de trabajo, le facilitaremos al alumno un cuaderno con cuadrícula Montessori.
Primero haremos un par de ejemplos en el aula, entre clase y clase, para ver cómo se desenvuelve, si le cuesta… así podremos saber si este modelo de letra le va bien o si debemos cambiar a otras de las opciones que teníamos antes.
Le explicaremos cual es el modo adecuado de escribir, cómo debemos coger el bolígrafo. Todo esto de tal manera que no se sienta incomodo o le llegue a doler la espalda o las articulaciones del brazo por la fuerza que ejerce.

Le diremos que cada día tendrá que copiar una hoja del cuaderno intentando hacer la grafía más parecida a la que él puede ver en el modelo.
Esta actividad le llevará como mucho 10 minutos al día (en casa). Así conseguiremos que el alumno no lo tome como un deber pesado que tiene que hacer todos los días y que sí lo haga con ganas de mejorar su caligrafía y con aprender nuevas adivinanzas. Para él tiene que tener un carácter de rutina y no convertirse en deberes añadidos.


Evaluación:

Para la evaluación de estas actividades debemos tener claro que no nos podemos dejar influir por la ortografía, ya que nosotros estamos trabajando la caligrafía. Buscamos que la letra del alumno sea igual o lo más parecida al modelo que le hemos dado, y por lo tanto le evaluaremos de forma continua, día a día, y a que este proceso es largo.
A la hora de evaluar, lo haremos comparando un modelo antiguo con uno nuevo, para ello nos fijaremos en los trazados y si la caligrafía es parecida o igual al modelo que le hemos ofrecido.
He escogido que estos modelos estén en un cuaderno porque así podemos ver el cómo empezó, cómo continuó y cómo ha terminado. Así a parte del docente que puede evaluarle según su progreso, puede ver él mismo todo el fruto de su esfuerzo y siempre es gratificante ver como la has ido entrenando y desarrollando.

Conclusión:

Una vez acabada la actividad me doy más cuenta del gran deber que tenemos los docentes. Tenemos en nuestras manos a muchos niños y niñas a los que tenemos que enseñarles a valerse por sí solos, les debemos enseñar a escribir, leer... Habilidades que irán desarrollando durante toda su vida, pero en la que nosotros debemos de dar el primer paso para que puedan empezar.

En cuento a la escritura, he descubierto muchas cosas que desconocía, como es el desconocimiento de que letra utilizar para enseñar a escribir, pero que aun sabiendo que hay letras más simples a la hora de hacer los trazos e interiorizar, seguimos enseñando esa letra Rubio que tanto nos ha costado a todos hacer. ¿Y todo para qué?
Poca gente sigue escribiendo en su vida adulta con ese tipo de letra, cada uno reinventamos la letra a lo largo de toda nuestra vida, ya sea por gustos, por modas o simplemente por facilidad motora.

Personalmente, como alumna que no tuvo una letra legible hasta 3 de la ESO, pienso que es de gran importancia preocuparse y ayudar a esos alumnos que sea por los motivos que sea, no escriben "bien". No deberíamos pensar "si escribe así es porque no sabe, que aprenda en casa" (frase muy repetida por muchos docentes a lo largo de mi etapa educativa), tendríamos que tener el instinto de ayudarles. Ayudarles a mejorar.


Webgrafía:
DaFont - Descargar fuentes. (2019). Recuperado de: https://www.dafont.com/es/ 
Labajo, I. (2018). Didáctica de la Lengua Española. Madrid. CSEU La Salle.
Labajo,I. (2019). Selección actividades de lectura. Madrid. CSEU La Salle.